El Ayuntamiento de Málaga ha rechazado todas las alegaciones –en torno a cuarenta– presentadas contra la modificación del plan especial del Centro (Pepri Centro) destinada a permitir una mayor altura en algunos edificios de la ribera oriental del Guadalmedina, de forma que dé cabida al proyecto de levantar un hotel de diez plantas, cinco más de las permitidas originalmente en la zona, en Hoyo Espartero, diseñado por el arquitecto Rafael Moneo.
Junto con el rechazo de las alegaciones, el Ayuntamiento dio ayer luz verde a la aprobación provisional de la reforma del Pepri Centro, con lo que continúa adelante con el proyecto que permitirá la modificación de las alturas en la ribera del Guadalmedina comprendida entre Puerta Nueva y el colegio García Lorca, una reforma que está consensuada con la Junta de Andalucía.
Las alegaciones han sido auspicidas en su mayoría por la asociación Málaga Monumental, que trabaja en defensa del patrimonio histórico, más otra presentada por el portavoz del grupo municipal de IU, Pedro Moreno.
De manera general, las alegaciones presentadas se oponían al proyecto de edificar un hotel en esa zona ya que supondrá la eliminación del histórico edificio de La Mundial, y de la calle Pasillo de Atocha y la desaparición de la trama urbana que componen las calles García Caparrós, Prim, Hoyo Espartero y Pasillo de Atocha.
En sus escritos de rechazo señalaban que la modificación del Pepri Centro se resume en «legalizar los excesos existentes respectos de las alturas previstas en la zona y promover el aumento de altura en algunas parcelas para igualarlas a la máxima permitida». En definitiva, «se usa simplemente para elevar alturas y no para ordenar la zona».
Incidían, además, en que la propuesta que avalan las administraciones va en contra de la protección de los valores patrimoniales en esta zona del Centro Histórico al no salvaguardar el edificio de La Mundial, que está incluido en el catálogo de edificios protegidos del Centro con el grado 2.
Rechazan también «la fractura» urbanística que supone la altura planteada para el hotel, de nueve plantas más un ático, con «las alturas dominantes de la zona» que van desde las dos a las cinco plantas.
La Opinión de Málaga, 25/06/2011
Desde el Ayuntamiento están dejando claro que hacen con Málaga lo que les da la gana. Si hay que destruir el patrimonio histórico-cultural lo destruyen, todo con tal de sacar tajada con los grandes empresarios de Málaga. Que la mafia campe a sus anchas.
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